A base de grandes jugadas
Los Pittsburgh Steelers necesitaron cada pedazo de su historia para vencer a los Seattle Seahawks por 21-10 en el Super Bowl y entrar en la historia.
Años más adelante, los fanáticos de Pittsburgh se recordarán como ganaron este trofeo tras realizar una jugada importante atrás de otra. Así le pudieron dar la despedida perfecta al corredor Jerome Bettis y el primer campeonato a su entrenador en jefe Bill Cowher. Una racha para los libros de los récords. Una intercepción que dio vuelta un partido. Una jugada de engaño que nadie vio venir.
Increíble juego de hoy, no tan emocionante como en ocasiones pasadas, pero parejo en buena parte del juego. Pittsburgh fue mejor y se llevó el título.