Confieso que una tercera parte de una película me parece demasiado, pero con ansias esperé la tercera parte de Saw, después de que la segunda parte superó mis expectativas y me hizo convertirme en fan de Lion’s Gate.
Sin duda no decepciona; la trama es envolvente, la ambientación es magnífica y las escenas de gore son muy realistas… demasiado, tal vez. El final sigue siendo espectacular —por no decir más—, aunque sin duda me gustó más el de la dos y ahora tal vez sí, sería buena idea por parte de los productores dejar morir la serie dignamente, pues no le puedo ver una buena excusa para realizar la cuarta parte, que por cierto ya se anunció.
Sin más, sigo diciendo que es una excelente película de terror, pero eso sí, no apta para estómagos débiles.