Desde La France, Frederic Martin nos cuenta una divertida historia de cómo un billete en la calle tiene potencial para ser mucho más que simplemente suerte. Sin animación demasiado ostentosa, el mensaje del corto es claro y al punto.
La verdad me pareció una fantástica pieza animada, aunque con la incursión de los animales todo agarra un tono un tanto exagerado.
(Perpetrado de Videosift)