Fue hace tan sólo un mes cuando comenzó una de las mayores transiciones que he experimentado en mi vida. Dejar de ser estudiante de tiempo completo para ser trabajador de tiempo completo no fue fácil para mi y apostaría que casi para nadie. He sido de los pocos afortunados que están a punto de terminar su carrera en este país y tengo mucho más que agradecerle al sistema educativo público más de lo que le puedo reprochar, pero nadie me enseñó a trabajar. Y no sólo eso, el Tec me malacostumbró a disfrutar de fines de semana que comenzaban el jueves en la tarde, prácticamente la mitad de la semana era de descanso, tiempo suficiente para escribir en un blog, leer algunos libros, programar algunas aplicaciones web, ver películas y salir en las noches.
Y de pronto me contratan para cubrir una jornada laboral de lunes a sábado de 50 horas en las que estoy desocupado, si acaso sesenta o noventa minutos diarios. Evidentemente algunas de mis actividades tendrían que verse reducidas y desgraciadamente therror ha sufrido las consecuencias. De eso y de mi trabajo me gustaría hablarles hoy.
Como les mencioné, fue hace exactamente un mes cuando comencé a trabajar. Mi super best friend de toda la vida me invitó a trabajar, pues requería de gente capaz, responsable y de confianza y pues, al no encontrar, tuvo que recurrir a mi. Verán, culpar al Tec de no enseñarme a trabajar es una acusación un poco desmesurada. Mi carrera es de nueve semestres, de los cuales ocho son en aula y el último es para realizar residencias, es decir, trabajar pero sin ser pagado o recibir poco con el fin de obtener experiencia.
David, mi amigo, tenía la necesidad de encontrar trabajo de verdad pues tiene familia qué mantener. Yo, en mis finanzas ando un poco quebrado, pero independientemente de la situación económica, trabajar de a gratis es perder el tiempo. La idea es que si hallas un lugar en donde te puedan pagar matas dos pájaros de un tiro. Eso hizo él y me llevó a mi también.
No sé qué tanto pueda dar detalles de mi trabajo, total, si me corren por mi blog no seré el primero, jeje. Trabajamos en Comercial Ochoa, una empresa grande que se dedica a la comercialización de abarrotes, estamos en el área de detalle, que se dedica a surtirle a tienditas y negocios pequeños. Sin rodeos, hemos sido contratados para sacar el departamento de un bache enorme en el que las utilidades generadas son mínimas y no existía un plan, un procedimiento, un sistema o algo que guiara al equipo de trabajo a consagrar las metas. El horario es abrumador, de lunes a viernes 7 a 4 y sábados de 7 a 1. Y aunque no lo crean, aún hay veces que siento que me falta tiempo para terminar.
Me pagan bien. Vamos, que por mi calidad de residente, con 90% de la carrera pero sin título ni experiencia nadie me habría contratado por tal dinero. Pero me pagan mal. A la semana ya de pronto tenemos la responsabilidad de la mercancía que se comercializa, un número de cinco cifras. Sin embargo la paga no es el único aspecto positivo, el ambiente de trabajo, los retos y la consigna con la que fuimos contratados, las oportunidades de crecimiento y más que nada, que es un trabajo de marketing, cosa que me encanta —aunque distribución es una de las P de marketing más menospreciadas—.
En resumen, es demasiado bueno para ser mi primer trabajo de tiempo completo, sin tener título. Nunca pensé en entrarle a un proyecto con tanta oportunidad de crecimiento y mucho menos dedicarme a marketing, cosa que acá en mi natal Chihuahua es poco valorado.
El día se me pasa volando. Si se dan cuenta, en el último mes la mayoría de los posts están publicados en la noche, el único micro ratito que tengo para compartir con ustedes lo que me encuentro por la web. corcholat no ha sufrido tanto pues es un esfuerzo conjunto, pero de pronto para este blog siento que no tengo tiempo, mismo sentimiento que a veces me llegaba cuando tenía fines de semana de tres días y medio, ahora imagínense con menos de la mitad de eso.
Pero esa es sólo mi situación, llana y objetiva. therror no lo veo como un trabajo o una obligación, lo veo como un hobbie. Mi idea cuando me decidí a hacer un blog en serio fue una meta sencilla: un post diario. No es el caso deslindarme de este compromiso ni mucho menos. Estoy avisando que pronto será posible que no pueda y los posts se van a hacer menos frecuentes, pero mi idea a largo plazo es no dejar de escribir aquí. Por casi seis años esto se ha impregnado en mi y realmente no logro visualizarme sin un lugar donde escribir y archivar mis pensamientos.
Y disculpen la insistencia, pero en corcholat siempre hay cosas nuevas suficiente para pasar una hora diaria entretenidos.
Como les digo, me siento muy contento con mi trabajo. Es una verdadera lástima que una cosa no pueda coexistir armoniosa con la otra, pero así es el tiempo.
P.S. Sigh Viendo el éxito obtenido con el concurso de Mega Man 9, prácticamente el primero que comente gana.
P.P.S. El día que me sentí Angelina Increíble historia, si la mitad de la gente hiciera la mitad de lo que hizo esta mujer, otro gallo cantaría.