Después de 25 años, Microsoft finalmente ha cambiado su logo, esta es la quinta iteración después de que las tres primeras duraran muy poco tiempo ―cuatro, uno y cuatro años, respectivamente― y que termina denotando el interés de la compañía por cambiar, así como de la caída del Microsoft que siempre conocimos y amamos odiando.
Su nueva imagen es más fresca e interesante, acompañada por el rebranding de sus tres principales productos: Windows, Office y Xbox. A continuación, el promocional.
Aunque no es The Next Microsoft, considero un paso adelante, aunque tardío e increíblemente cliché; la explosión de colores en tercera dimensión es un detalle ya muy visto y con el cierre ya sabíamos que el icono termina centrado y luego se mueve para meter la tipografía.
Viendo el viejo logo, me sorprende tan sólo pensar cómo se habría visto en 1987, pues es un diseño muy bien hecho, simple y memorable. Punto y a parte es que nos traiga tan malos recuerdos por la connotación, pero no por nada duró tanto tiempo.
P.S. Las innovaciones de Internet Explorer IE6 fue un navegador muy adelantado a su tiempo; el problema es que duró demasiado.