Prácticamente sin saber más que Gael García participaba en esta película y que por alguna razón aparentaba ser muy buena, este fin de semana decidí ver No.
Esta es una gran historia para todos los que estudiamos mercadotecnia; es el relato de un publicista en Chile que se involucra en el plebiscito de 1988 de Pinochet que definiría la continuidad del dictador o un cambio de poder. Pensando que es una misión imposible —una cortina de humo—, deciden utilzar la creatividad para convencer al pueblo.
Brillantemente ambientada, la cinematografía de No ayuda mucho a hacernos creer que en verdad estamos a finales de los años ochenta. Las actuaciones son buenas, pero lo que más destaca es la historia, aunque tiene ciertas partes que definitivamente se sienten lentas y aburridas. Lo que no me queda claro y creo que sería un gran plus es si el personaje de René Saavedra está basado en una persona real.
Sea como sea, hay documentación histórica de lo que se les mostró a los chilenos, un estilo que creo que permanece en sus campañas políticas hasta el día de hoy. Chile ha nominado a esta película para participar en la siguiente entrega del Oscar, y con muy buena razón. Vayan a verla, muy recomendable.