A veces es bueno ir al cine sin expectativas: sólo llegar, sentarnos y disfrutar la función. Little Boy así fue, sin muchas opciones en cartelera, y elegida por un tercero, la película era un misterio total; no hay nombres grandes, no hubieron muchos trailers, es más, no sabía siquiera que existía.
A veces esas sorpresas se tornan en malas experiencias. Y a veces no, pues ese fue el caso de Little Boy, una película tan bien ejecutada, con una trama tan sólida y sorpresas por todos lados. Desafortunadamente no ha tenido una recepción muy buena, pero sin duda va a ser uno de los highlights del año, y con un poco de suerte y si la Academia es justa, tendríamos que verla nominada.
Altamente recomendable, en especial si no sabe ni de qué se trata; dejen que la vida los sorprenda.