Caso raro de una película de animación es el que fue Kubo and The Two Strings: pasando prácticamente de noche para muchos, pero teniendo una crítica sobresaliente para quienes sí la pudieron ver.
De lo poco que sabía de Kubo es que utiliza una técnica fusión de stop motion con animación digital.
Obra maestra, debería tener unas dos o tres nominaciones para la Academia, y llevarse por lo menos una estatuilla. Kubo es una maravilla por donde se le vea, comenzando con el proceso de animación al que se le invirtieron un par de años en su producción, logrando un resultado artesanal, refinado digitalmente.
La historia, si bien se desarrolla en Japón, tiene todos los tintes argumentales de una película animada de la región, pues no teme a romper convenciones y a sorprendernos con algo que no hayamos visto. Me recuerda mucho a The Boy and The Beast.
Kubo and The Two Strings es un must para todo fanático de una buena cinta, y un deleite visual de alta calidad que rara vez logramos ver en una película.
P.S. Muere Carrie Fisher Este 2016 no deja de sorprender.
Kubo and The Two Strings fue escrito por fael el día martes 27 de diciembre de 2016 a las 8:48 p. m.