Se requiere valor para ir a una convención de hackers y actuar como su conejillo de indias, buscando averiguar el daño que pueden hacer. Kevin Roose, de Fusion, aprovechó DEFCON, el mayor evento de seguridad digital en el mundo, para ver qué tanto podrían destrozar su vida digital.
El primer ataque es francamente sorpresivo; muchos de los servicios que pago requieren amplia información de mi para hacer algún cambio menor, no digamos para cambiar una contraseña. Supongo que el ruido del bebé sirve para dos causas: primero, para generar empatía con quien sufre, y después, para buscar callar ese ruido lo más pronto posible, tal vez saltándose un par de trabas en el proceso.
El segundo ataque se desencadena rápidamente en una vorágine, pero comienza de un punto básico de seguridad: hay que revisar las URLs y desconfiar de todo. Luego de eso, supongo, ya es trivial encontrar el resto de la información.
Si algo me ha enseñado la experiencia es a no dejarles huecos a los criminales—especialmente con las preguntas secretas. Normalmente contesto algo que no tiene nada de sentido con la pregunta real, con el objetivo de blindar este lado, pues la respuesta puede ser muy fácil de conseguir.
(Perpetrado de digg)
P.S. Microsoft adquiere Xamarin El final feliz a la historia de un joven mexicano que se entrevista en Microsoft y no le dan el trabajo debido a su visa de trabajo, funda una compañía y 20 años después del primer acercamiento, finalmente termina en Microsoft.