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El primer paso para construir una identidad en la web no es crear una cuenta de facebook y twitter. El primer paso es entregar lo que se promete.

La definición de social media es nueva, su concepto no. El word of mouth ha estado siempre; nos gusta expresar y compartir lo que nos agrada, pero disfrutamos más haciéndolo con lo que nos desagrada (es un tipo de mecanismo de defensa grupal). Lo que ha cambiado internet es que este comentario se quedará por siempre y llegará a mucha más gente.

Antes pensaba que hacer marketing era hacer comerciales. Resulta que a esto se le llama publicidad y es tan sólo una subrama de promoción, que a su vez es una de las cuatro variables de la mezcla de mercadotecnia. Lo interesante del caso es que es posible hacer marketing sin publicidad.
Caso en cuestión, la Salsa Valentina: un producto ubicuo, disponible tanto en supermercados como en tiendas minoristas (plaza o distribución); con características propias, distando mucho de ser la mejor salsa del mundo pero consciente con su mercado (producto); a un costo mucho más que justo por las características que ofrece (precio); y con una marca reconocible (promoción).

Es muy fácil subirse al barco del social media, pero antes de hacerlo, se tiene que comenzar no haciendo social media, sino creando un producto que esté a la altura de las expectativas. Esto es mucho más valioso que un millón de fans.